Política de denuncia de irregularidades

Es importante para la empresa que cualquier fraude, conducta indebida o irregularidad sea denunciada y tratada adecuadamente. Por lo tanto, la empresa anima a todas las personas a plantear cualquier preocupación que puedan tener sobre la conducta de otras personas en la empresa o la forma en que se dirige la empresa.

Esta política establece la forma en que los individuos pueden plantear cualquier preocupación que tengan y cómo se tratarán esas preocupaciones. Se aplica a todos los empleados de la empresa, a los empleados a tiempo completo y a tiempo parcial con contratos de duración determinada y a otras personas que desempeñan funciones en relación con la organización, como trabajadores de agencias y contratistas. También puede utilizarla cualquier tercero o contraparte externa.

Esta política y procedimiento no son contractuales y la empresa se reserva el derecho a modificarlos si, a su entera discreción, así lo decide.

Principios
  • Todo el mundo debe ser consciente de la importancia de prevenir y eliminar las irregularidades en el trabajo. Las personas deben estar atentas a cualquier conducta ilegal o poco ética e informar de cualquier cosa de esa naturaleza de la que tengan conocimiento.
  • Cualquier asunto planteado en el marco de este procedimiento se investigará de forma exhaustiva, rápida y confidencial, y el resultado de la investigación se comunicará al trabajador que planteó la cuestión. 
  • Ninguna persona será victimizada por plantear un asunto en el marco de esta política. Esto significa que la continuidad en el empleo y las oportunidades de promoción o formación futuras de la persona no se verán perjudicadas por haber planteado una preocupación legítima.
  • La victimización de un trabajador por plantear una denuncia cualificada constituirá una falta disciplinaria.
  • Si se descubre una conducta indebida como resultado de una investigación realizada en el marco de este procedimiento, se aplicará el procedimiento disciplinario de la organización, además de las medidas externas apropiadas.
  • La presentación maliciosa de una denuncia falsa constituye una infracción disciplinaria.
  • Las instrucciones para encubrir irregularidades constituyen en sí mismas una infracción disciplinaria. Las personas que reciban instrucciones de no plantear o proseguir cualquier preocupación, incluso por parte de una persona con autoridad, como un directivo, no deben aceptar guardar silencio.

Este procedimiento es para revelaciones sobre asuntos que no sean una violación del contrato de empleo del propio empleado. Si un empleado está preocupado de que su propio contrato haya sido, o es probable que sea, violado, debería utilizar el procedimiento de quejas de la organización.